Déjate llorar, desbórdate por completo, vacíate. Apoya tu cabeza en mi hombro, deja que las lágrimas caigan, resbalen y te limpien las mejillas. Húndete en mí, abrázame fuerte. Estaré aquí. No me moveré, acércate a mí y deja volar libre a tu tristeza. Deja que te engulla esa melancolía, ese deseo de desaparecer, de caer y caer hasta tocar fondo. Deja que lo haga, porque al final del pozo estaré yo. Deja que lo haga porque no correrás peligro, yo estaré allí. Te atraparé en mis brazos y te sostendré. Yo te salvaré de la caída.
Si sientes la necesidad de acabar con todo.
Si sientes a las carcajadas amargas salir por tu garganta.
Si sientes que estás solo, que en este camino tan transitado nadie te ofrece la mano.
Si lo sientes, ven. Yo estaré ahí.
Cerca de ti.
Deja que tu cuerpo se encoja. Deja a tu labio inferior temblar, que tu piel palidezca y que tus ojos se enrojezcan. Deja al nudo de tu garganta crecer, deja que te falle la voz. Permite a tu corazón sentir esa desgarradora sensación de soledad, de gris nostalgia naciendo del más terrible de los miedos. No quieras dejar de sufrir así. Déjate llevar, siente lo que tengas que sentir. Date un respiro y permítete tener un día negro, un lunes manchado de sangre.
Si sientes la necesidad de acabar con todo.
Si sientes a las carcajadas amargas salir por tu garganta.
Si sientes que estás solo, que en este camino tan transitado nadie te ofrece la mano.
Si lo sientes, ven. Yo estaré ahí.
Cerca de ti.
Y cuando todo haya terminado y la noche aceche en tu ventana, mírame. Cuando sientas un alivio extraño en tu interior búscame con tus llorosos ojos, porque yo estaré ahí. Incluso cuando creas que la luna es la única que te acompaña. Incluso cuando no veas nada más que una profunda oscuridad.
Recuerda que somos grandes. Recuerda que somos eternos, y que esta tristeza no lo es. Recuerda cómo cruzamos bosques llenos de maleza. Recuerda cómo corrimos contra la dirección del viento, cómo escapamos de las garras del conformismo, cómo nos desasimos de las mandíbulas del tiempo. Recuerda lo que vivimos, recuérdanos luchando contra todo lo que nos hizo daño.
Y cuando sientas la necesidad de acabar con todo.
Y cuando sientas a las carcajadas amargas salir por tu garganta.
Y cuando sientas que estás solo, que en este camino tan transitado nadie te ofrece la mano.
Cuando lo sientas, ven. Yo estaré ahí.
Cerca de ti.
Zoom into me - Tokio Hotel.
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